Origen de la Agricultura

¿Qué es la agricultura? Definición de agricultura

La agricultura es el conjunto técnicas y saberes encaminados a trabajar la tierra para poder cultivar en ella y poder de ese modo producir alimentos. La palabra “agricultura” proviene del latín donde “agri” es campo y “cultura” es la acción de cultivar.

Terrazas cultivo de arroz en Indonesia. Origen de la agricultura
Terrazas cultivo de arroz en Indonesia

Inicios de la agricultura

El ser humano era cazador y recolector, y era de ahí de donde obtenía los alimentos para poder desarrollarse: conseguían las grasas y las proteínas de la caza, de las semillas, de los vegetales; los hidratos de carbono los obtenían de las diversas bayas silvestres a las que tenían acceso, los tubérculos y de las raíces, entre otros.

Aunque el establecimiento de la agricultura, se remonta al Neolítico, concretamente a la Edad de Piedra, se cree que mucho antes de este periodo, varios pueblos habían empezado a abandonar el nomadismo para establecerse en puntos fijos y poder así cultivar la tierra. Varios estudios apuntan a que la agricultura nació en Oriente Próximo, concretamente en Mesopotamia, hace más de 10.000 años.

Cuando nace la agricultura, el ser humano ya había dominado el desarrollo de herramientas y de armas, usaba el fuego y sabía protegerse de las inclemencias meteorológicas. No hay que olvidar que la agricultura nace tras una larga evolución de varias técnicas y procesos relacionados con el cultivo de la tierra y tras muchos años de observación de la naturaleza, y no se puede en ningún caso considerar que la agricultura nació como un hecho aislado o puntal.

Varias voces defienden que la agricultura no se produjo en único lugar sino que pudo tener inicio en varios puntos del globo con diferentes características los unos de los otros, y de ahí pudo extenderse al resto del mundo.

Los primeros cultivos que, las hasta entonces sociedad cazadora-recolectora, sembraron fueron cereales y leguminosas, más concretamente la cebada, el trigo y la lenteja. Estos cultivos dieron pie a la domesticación de otras especias que pudieron adaptarse a los diversos climas y geografías, logrando una mayor eficiencia y productividad.

Tras la domesticación de las especies vegetales, la nueva sociedad pasó a la domesticación animal con fines productivos, lo que supuso un gran hito para el desarrollo de la humanidad.

El establecimiento de la agricultura en la sociedad supuso un mayor acceso a los alimentos, lo que permitió el crecimiento demográfico, el desarrollo de nuevas actividades y la expansión de nuevas civilizaciones y culturas. El nacimiento de la agricultura permitió el desarrollo de sociedades productivas y jerarquizadas, tal y como las que han evolucionado hasta nuestros días.